lunes, 26 de diciembre de 2011

Everyday is a sunday evening

Al pensar en lo que pude haber dicho hace ya muchos años, en todas esas esperanzas y sueños que tenía, llegué a la conclusión de que si la medida del éxito en la vida consiste en que las cosas salgan como uno quiere, mucha gente me diría fracasada. Lo más importante es no amargarse por las desilusiones que nos da la vida. Hay que aprender a no quedarse en el pasado, y darse cuenta de que no todos los días tienen que ser lindos. Y cuando te encuentres perdido en la oscuridad de la desesperación, recuerda que sólo en la oscuridad de la noche se pueden ver las estrellas; y ellas de te llevarán por el camino de regreso a casa. No hay que tener miedo de equivocarse y caer. Porque en general, las mejores recompensas vienen de las cosas que más tememos. Quizás obtengas todo lo que deseaste. Quizás obtengas mucho más de lo que alguna vez imaginaste. ¿Quién sabe a donde te lleva la vida? El camino es largo, y al final... El destino es el viaje.

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